Narra _______:
Simplemente me quedo quieta. No soy capaz de moverme. Un sudor frío recorre mis extremidades incapacitándolas. Sigo en el comedor, esperando. Esperando...esperando ¿a qué? No lo sé. ¿A que Draco vuelva? ¿A que todo pase? Esperando que esto no sea más que una triste pesadilla. Pero si Draco está en ella, ¿No sería un sueño? Todo es muy confuso. No debo agobiarme más, no debo ser débil. No ahora.
Con gran fuerza de voluntad me levanto de la mesa y me dirijo al lugar donde se encuentra Evenaar, una parte del patio de atrás del castillo, donde Hagrid lo ha puesto todo a la disposición del dragón.
-Buenos días Evenaar -le saludo un poco más animada. Siempre es reconfortante verle.
"_________, siento algo oscuro dentro de ti ¿te encuentras bien?" habla el dragón en mi mente.
-No es nada, solo estoy preocupada
"Una preocupación muy grande entonces. ________, sabes que puedo ver a través de ti, literalmente. Estamos unidos. De nada sirve que lo ocultes."
Pronuncio una leve carcajada. Aún me cuesta recordar ese pequeño detalle.
-Aveces no es nada conveniente esto de la unión ¿sabes? -los ojos de Evenaar me sonríen.
"Entonces deja de ocultarlo y cuéntamelo"
-Esta bien...-suspiro-. Es por Draco, últimamente parece que estoy dando palos de ciego con él. Sólo se hacerle enfadar.
"Puede que no sepa mucho sobre las relaciones entre humanos, quiero decir, entre dragones es todo mucho más simple y natural..."
-Ahórrate los detalles por favor -digo bromeando. Evenaar deja escapar un gruñido pero yo sé que se está riendo y eso me reconforta.
"Quería decir que hacéis montañas de un grano de arena. Le estás dando demasiadas vueltas y eso nunca es bueno. Ahora sólo limítate a esperar, entrena, distráete y con el tiempo él lo entenderá también"
- ¿Tendré que esperar mucho? Esto va a ser muy duro...
"No sé lo que pasa por la cabeza de ese muchacho pero puedo sentir que su alma es noble, lo entenderá, estoy seguro."
Vuelvo a sonreír a mi escamoso amigo.
-Entonces creo que es hora de despejarnos un poco. ¿Te hace un paseo aéreo?
"Eso siempre"
Narra Draco:
Cuando llegué al comedor _______ ya se había marchado y tras buscarla durante diez minutos por fin di con alguien que la había visto con su dragón. Corro hacia el patio a tiempo para ver como ambos, jinete y dragón, alzan el vuelo con gran velocidad. ¡Mierda! No deberían hacer eso, el escudo que protege la escuela no es lo suficientemente alto como para proveer de un espacio aéreo en el que puedan entrenar. Probablemente traspasarán el escudo y quedarán sin protección. No puedo dejarla a merced del psicópata que deambula por los bosques. He de ir tras ella.
Me apresuro a ir hacia el campo de quidditch y cojo mi escoba, una nimbus 2001 que, aunque es más bien improbable, espero que sea lo suficientemente rápida como para alcanzar a esos dos.
Alzo el vuelo y les persigo por el aire. Por suerte aún no han cogido velocidad así que me resulta más fácil acercarme, pero sigue sin ser suficiente.
Cuando veo que las alas del dragón comienzan a batirse más raído grito el nombre de _________ con la esperanza de que me oiga. Si aumentan el ritmo no seré capaz de llegar hasta ellos. Para mi desgracia mi voz no se oye a esta distancia y Evenaar y ________ continúan.
Empiezo a desesperarme pues no sé que más puedo hacer. Sólo tengo clara una cosa; no han de salir del escudo.
Pronto una loca idea aparece en mi mente y, sin tener tiempo para meditarla, la realizo. Con mi varita apunto hacia el sitio por el que he venido y mientras fijo mi mirada en el gigantesco dragón grito.
-¡Expelliarmus!- un rayo escarlata sale disparado desde mi varita. Su potencia me propulsa hacia delante a una velocidad en la que me cuesta mantener el equilibrio sobre la escoba. Demasiada velocidad, debería decir. Pierdo el control de mi escoba y me tambaleo hacia los lados. Hago un último esfuerzo por sostenerme y alcanzar a _________ pero no sale bien y me precipito al vacío.
-Aaaaaaahhhhhhh!! -grito. Entonces ________ me oye, y menos mal porque si no estaría hecho tortilla. Hace que Evenaar cambie de dirección y ambos acuden en mi ayuda. No pasa mucho cuando noto el impacto de mi cuerpo contra el escamoso cuerpo de la bestia.
-En los cuentos que me leían de niña solía ser el apuesto caballero quién acudía al rescate de la bella princesa -me dice _______ con su sonrisa de medio lado. Parece que se acuerda de la pelea que tuvimos antes porque de repente su mirada se apaga y su sonrisa se desdibuja. Gira la cabeza y sin que me de tiempo a añadir nada aterrizamos de nuevo en el patio.
-_________... - empiezo. Nada más comenzar a hablar veo que los ojos de la muchacha se cristalizan. Estoy acostumbrado a verla segura y fuerte, y odio no saber como actuar cuando es tan frágil.
Antes de continuar no puedo reprimir el impulso y la abrazo, cosa que ella al parecer agradece, pues rodea mi cuerpo con sus brazos también. - Sabes que no deberíais salir del escudo del castillo. -digo aún entre sus brazos.
-Lo sé es sólo que... en fin, necesitábamos despejarnos un poco. -se separa de mi despacio pero aún trata de evitar mi mirada. No puedo seguir enfadado con ella, no ahora. Ya no.
-_________ mírame -digo sujetando su cara con ambas manos. - La realidad es como es, y vas a tener que afrontarla. Yo ya lo he hecho y entiendo por qué dudaste en aquel momento. Pero lo pasado pasado está, no voy a darle más vueltas así que deja de torturarte por esa minucia, no estoy enfadado. -al oír esas últimas palabras noto que sus facciones se relajan por un segundo.
-Pero fue cruel...
-Has pasado por mucho, entiendo que quieras liberarte de tus cadenas como sea. Sólo te pido que la próxima vez me dejes estar a tu lado para ayudarte.
__________ no dice nada. Se limita a observar mi rostro y yo vuelvo a perderme en sus profundos ojos, ahora repletos de lágrimas que amenazan con salir.
-Además, creo que tengo cuentas pendientes con el mal nacido ese. Quizá si le pides a Evenaar que se lo coma... -suelto en broma para intentar destensar la situación. Me relajo cuando _________ se ríe. Evenaar parece opinar al respecto en su cabeza y ella se gira hacia el dragón con brusquedad.
-Dice que alguien tan podrido le daría dolor de estómago-me aclara
-Y no le falta razón... - una vez más ambos nos quedamos callados - Entonces ya está todo arreglado... -diga casi preguntando. _________ me sonríe.
-Aún nos queda el tema del ex novio psicópata pero si, está todo arreglado.
La alegría que siento cuando dice eso último es algo que me va a acompañar hasta la tumba. Estoy tan feliz que lo único que puedo hacer es alzar su rostro y juntar sus labios con los míos. _________ me corresponde pasando sus manos por mi cuello y acariciando mi cabeza. Desearía parar este momento pero desgraciadamente la falta de aire nos hace separarnos.
-No sabes cuánto he echado de menos esto - se me escapa. Noto como mi cara se sonroja y a ________ no le pasa inadvertido.
- Definitivamente eso es algo que no se oye todos los días... Pero estoy tan feliz que sólo por hoy voy ha hacer una tregua contigo.
-¿Una tregua? Lo siento pero yo nunca he dicho que vaya a dejar de picarte, sinceramente lo disfruto enormemente. -_________ me golpea en el hombro ofendida y yo suelto una carcajada.
-Eres un...
-Encantador príncipe con un pelo envidiable. -parece que va a replicarme pero de repente se para y me mira directamente a los ojos.
-Si, justamente eso.
Quiero besarla de nuevo cuando alguien nos interrumpe.
-Señorita _________, o bueno... si ha descubierto ya su apellido le agradecería que me informase. El director desea verla en su despacho. -dice la profesora McGonagall con su habitual tono.
De pronto recuerdo por qué fui a buscar a _________; tenía que informarle sobre la conversación del director con el ministro de magia Fudge. Tenía que decirle que el Torneo continuaba y que estábamos sólos.
Quizá sea eso lo que Dumbledore desea decirle...
Narra _________:
-¡¿Qué!? - exclamo cuando Draco me informa de que el Torneo continuará. No me puedo creer que el ministerio vaya a ocultar esta batalla a todo el mundo...
Caminamos por los pasillos del castillo rumbo al despacho de Dumbledore, el cual me ha solicitado, y por el camino Draco me ha relatado su pequeño encuentro con el director en la orilla del lago. No tardamos en llegar a nuestro destino y cuando lo hacemos Draco decide esperar en la entrada.
-¿Quería hablar conmigo director? -pregunto una vez adentro. Dumbledore se encuentra sentado en su escritorio, que está cubierto por un montón de pergaminos dispersos que le ocultan.
-¡Ah! Señorita ________, supongo que el señor Malfoy ya le ha informado de la situación en la que nos encontramos. No te preocupes, recibirás toda la ayuda por mi parte. Por eso he estado ideando un plan que tal vez nos ayude a acabar con esto lo antes posible.
-Le escucho
-De acuerdo, el director Karkarov nos ha ofecido una terintena de sus alumnos más fuertes, que actualmente se encuentran entrenando para la batalla. Entre las Beauxbatons también hay algun voluntario y justo ahora el profesor Snape y McGonagall están haciendo una prueba a los alumnos de últimos cuersos de Hogwarts para seleccionar a los más aptos. Todos ellos lucharán a tu lado cuando la batalla llegue. Entre tanto has de hallar un modo de utilizar aquel diamante en nuestro beneficio. Tal vez puedas usarlo como fuente alternativa para tu cetro... quién sabe, dejo eso a tu cargo.
-Y.. ¿ya está? Pensaba que el Torneo...
-El Torneo es completamente relevante en estos momentos, a pesar de lo que diga Fudge no voy a poner en riesgo la vida de más alumnos por un mero temor. No te preocupes y concéntrate en tu poder. Tal vez úsando la piedra puedas hallar dónde se encuentran las otras seis, y por consiguiente, dónde se encuentra Saphir.
-De acuerdo profesor, y... gracias por todo.
-No me las des, __________, como te dije ya una vez; Hogwarts prestará su ayuda a todo aquel que la pida, o más bien, a todo aquel que la merezca.
Dumbledore me sonríe una vez más antes de que abandone el despacho. Estoy decidida, ya no hay nada que me pare... excepto la espalda de Draco cuando abro la puerta. Me choco contra él sin poder evitarlo.
-¡Hey! ¡Cuidado!
-Lo siento, no deberías ponerte en mitad del camino.- le digo acusadora.
- Y tu no deberías pasarte, estás hablando con un príncipe.
-Si, lo que tu digas... -me río. Ambos comenzamos a caminar sin rumbo.
-Escucha he estado pensando en lo que dijo McGonagall -empieza Draco.
-¿Qué dijo?
-Lo de tu apellido ¿Recuerdas cómo es? -me detengo a pensarlo un momento pero nada acude a mi cabeza. Me separaron de mi familia cuando era muy pequeña, es normal que no lo recuerde.
-No, en realidad creo que nunca he tenido uno.
-Me lo temía ¿entonces por qué no te buscas uno?
-Es una buena idea.
-¡Genial! Entonces... ¿Qué te parece... Malfoy?
-¿Qué? ¿Y apellidarme como el príncipe de los lechosos? Creo que paso, gracias. -digo picándole.
-Disculpa pero es un apellido con mucha clase, aunque una plebeya como tu es incapaz de apreciar su belleza.
Me giro bruscamente y me planto delante del rubiales obligándole a detenerse.Me acerco despacio a Draco y me paro a escasos centímetros de su rostro.
-Plebeya ¿eh? Es una pena, nustras clases sociales son tan diferentes que creo que esto no podría funcionar principito - le empujo hacia atrás suavemente con una media sonrisa en la cara pero antes de que logre separarle del todo Draco agarra mi muñeca y tira de mi hasta que nuestros cuerpos quedan pegados. Es increíble lo bien que encajan, como dos piezas de un mismo puzle.
-Lo siento, pero este príncipe no va a renunciar a uno de sus mejores pasatiempos por una simple diferencia social - me contesta con suficiencia. Pronto su cara se vuelve tremendamente seria. -Y cuando digo que deberías llevar el apellido de un príncipe es porque no voy a rendirme hasta que eso sea verdad.
Sus labios se juntan con los míos en un beso cargado se sentimientos. Nuestras lenguas bailan al compás de nuestras bocas y sólo cuando nos separamos entiendo que ha querido decir.
:´3
ResponderEliminarQe bello! :') siguelaaa esta muy buena :B amo a Draco es tan xjfshxkocsufdk xd. Arte Paz Snape Potter Malfoy
ResponderEliminar¡MADRE MÍA! Me he leído toda tu novela en un día, y la verdad, me ha parecido corto, y me dolió llegar hasta el último capítulo publicado. En fin, a lo que voy (es que me enrollo mucho...) ¡ESCRIBES MUY BIEN! Tu novela es muy buena en demasiados aspectos, es decir, no es como muchas otras, que, se parecen mucho entre si, esta es tan... Diferente, no sé, es difícil encontrar novelas que realmente valgan la pena, pero esta... WOW. Mmmm, no sé que más decirte -tengo tanto por decirte que se me olvida más de la mitad- pues que me encanta tu narración, tu idea, y TODO, también amo a Draco. (*-*) ¡SIGUE PRONTO!
ResponderEliminarDe verdad? Muchísimas gracias, intento subir un cap cada semana o así pero esta estaba de exámenes y se me ha complicado un poco. Pronto subiré un par, la recta final!!
EliminarMuchas gracias por comentar, no suelo exigir los comentarios pero cuando son así realmente me entran ganas de seguir. :)
PD: Probablemente hayas notado que tengo una obsesión con los dragones :P
¡Entonces ya tenemos una obsesión en común! Mi habitación está completa y absolutamente llena de dibujos de ellos, e incluso conseguí una sudadera con 'escamas', sí, tenemos una obsesión.
EliminarYo tengo la manía de dejar graaaaaaaaaandes comentarios, porque creo que una novela así tiene muchísimo trabajo, y se merece muchísimos comentarios.
Tu novela es increíble, y no me cansaré de decírtelo.
Y en cuanto a los capítulos, eh, yo también acabo de entrar en semana de exámenes y no puedo con algunas de mis novelas, pero voy a ello, es estresante. No tengas prisas, porque como escritora la presión no mola nada, jajaja, en fin. ¡sube cuando puedas!